Las palabras de Esteban fueron dolorosas. Ella le confesó que aún lo quería y él le recalcó que ya no significaba nada en su vida.
Culpas hay muchas. Ambos cometieron errores. Abigail no debió irse pero tenía que hacerlo. Esteban no debió quedarse callado como si su partida no le hubiera importado. ¿Pero ya es tarde verdad?- ella se preguntaba.
Tanto tiempo juntos. Para que de la nada todo se pierda sin causas ni evidencias
El tiempo dejó de correr, por segunda vez Esteban no impidió su partida. Abigail lo único que quería era escuchar un "No te vayas otra vez, perdóname, haré todo lo posible para que nada vuelva a ser como antes pero quédate conmigo".
Nunca sucedió.